El desarrollo de conocimiento práctico y útil para mejorar la producción y productividad de peces tropicales es uno de los pilares clave en los que se trabaja con especial dedicación. A través de procesos formativos y una gestión efectiva del conocimiento, se promueve la implementación de Buenas Prácticas Productivas que optimizan los resultados en el sector. Un aspecto fundamental de este esfuerzo es garantizar la participación protagónica de las mujeres, tanto en cursos de especialización técnica como en formaciones más generales, fortaleciendo sus capacidades y su rol dentro de la cadena productiva. Esta estrategia no solo impulsa una mayor eficiencia en la piscicultura, sino que también contribuye a la equidad de género y al empoderamiento económico en las comunidades.